No pienses que estoy loco, escúchame,
que yo ya no hago locuras,
si mancho el suelo de sangre
será porque mi herida no se cura,
añoro tu luz que me guiaba,
sin ti camino a oscuras,
si sufro en silencio tu ausencia
será porque callo lo que mi alma murmura,
yo quiero tenerte, abrazarte, besarte,
quiero amarte al anochecer
y me doy cuenta que tal vez
la culpa no haya sido solo tuya.
No creas que soy tonto, mírame,
que yo no digo tonterías,
si busco soles en la noche
será porque me faltan estrellas en el día,
echo de menos tu risa, tus gestos,
sin ti mi vida está vacía,
si extraño el calor de tus palabras
será porque mi cama sigue fría,
yo quiero tu boca, tus besos, tu aliento,
quiero el roce de tu piel
y me doy cuenta que tal vez
toda la culpa haya sido mía.
Anda y dime qué me queda ahora
de aquellas tardes olvidadas,
de tus sueños en mi almohada,
mis letras son lágrimas que mi corazón llora,
dime qué me queda ahora
si ya no tengo tu mirada
ni tu cuerpo en la madrugada,
yo estoy solo y tú estás sola
y ya no queda nada.
Anda y dime qué me queda ahora
de los cigarros compartidos,
de los momentos vividos,
sigo siendo un necio que se enamora,
dime qué me queda ahora,
solo una historia inacabada,
tu recuerdo en la alborada,
yo estoy solo y tú estás sola
y ya no queda nada.
Alcaucín, 9 de Octubre de 2013